QUÉ TE FAVORECE SEGÚN TU COMPLEXIÓN
IMAGEN, Junio 2023Tipos de silueta
Cuerpo manzana
¿Cuántas veces has podido leer o escuchar a una persona más o menos experta en estilismo halar sobre el tipo pera, manzana...? Y tú pensando que eso no eran más que frutas... ¿De qué hablan? Es muy sencillo, para sistematizar lo que yo llamo la teoría de las hechuras, lo más cómodo es clasificar a las personas según su cuerpo y según la complexión que tenga, y desde ese conocimiento, saber las hechuras y cómo usar los colores para equilibrar las formas.
Recuerda que la belleza no viene de la perfección sino del equilibrio de las formas y que el tipo considerado más hermoso en mujer es el de reloj de arena, con hombros y cadera a la misma altura y sin embargo una cintura muy inferior. Esta teoría es sólo orientativa, así que, si por ejemplo, a ti te encantan los pantalones de campana pero no son aconsejables para tu cuerpo, no te frustres, hay mil formas de hacer que encajen en tus estilismos. No es ley, sólo consejos. Te gustaría saber cuál es tu complexión para saber después cuáles son las prendas que más te favorecen? Pues vamos allá:
1. Tipo reloj de arena
Como decíamos antes, es el más equilibrado y el ideal que debemos tener de referencia. Las personas que gozan de esta complexión son igual de anchas de hombros y cadera y tienen una cintura mucho más estrecha. Así que podrían ir por la vida con prendas ajustadas, sin usar más colores que el negro y estarían perfectas. Sólo un consejo si es tu figura: evita sacar la camisa por fuera o el jersey oversize (o talla grande) o parecerás un tipo cuadrado.
QUÉ TE FAVORECE SEGÚN TU COMPLEXIÓN
2. El tipo cuadrado
Lo tienen las personas con cuellos, hombros, cintura y cadera están a la misma altura. Si se trata de una persona muy delgada y muy alta se le llamará tipo rectángulo. Si ésta es tu complexión, enhorabuena, la mayoría de las prendas te quedarán muy bien pero deberás crear visualmente una cintura que no existe. ¿Cómo? Con blusas o vestidos cruzados, por ejemplo, americanas entalladas, camisas con pinzas estéticamente ubicadas, por ejemplo.
3. Tipo rectángulo
Es igual que el cuadrado pero mucho más alta y muy delgada, lo que antiguamente se conocía como un palo de escoba. Es perfecto para vestir en pasarela o catálogo y aunque quienes lo tienen suele acomplejarles la falta de curvas, el resto del mundo las envidia porque todo les sienta bien. El único consejo que te daría es que juegues con los volúmenes arriba y abajo para crear curvas donde no las hay pero siempre eligiendo: o arriba o abajo, aprovecha y superpón capas (cosa que las bajitas no podemos) emplea colores vivos y estampados exagerados. Tu cuerpo lo aguanta todo... Evita languidez, rayas verticales, fulares a los lados, melenas exageradamente largas y lacias. Y eres la única que se puede permitir llevar pantalones de campana sin ir ridícula.
4. Tipo pera o guitarra
Es el más común en las mujeres. Se trata de personas con los hombros más estrechos que la cadera. Se tiene esta complexión cuando las prendas de arriba son de talla menor que las de abajo. Por ejemplo, quien utiliza unas camisas de la talla 36 y un pantalón de la 40 o más. Puede deberse a una cadera (ósea) muy ancha o a una acumulación de grasa o líquidos en la parte inferior del cuerpo: glúteos y muslos. Sea por lo que fuere, (y dejando de lado las posibilidades de equilibrarlo con ciertas técnicas de las que hoy no vamos a hablar) la forma de equilibrarlo es tan fácil que parece un juego de niños. La idea es dar volumen arriba y restarlo abajo, por lo que vamos a usar colores claros arriba, rayas verticales, estampados... hombreras, mangas farol, jamón y toda clase de volúmenes. Y por el contrario restaremos visualmente volumen en la parte inferior a base de colores oscuros, prendas rectas, telas con mucha caída, huir de los volúmenes y los bolsillos (ni grandes ni pequeños) y tal vez rayas verticales de haberlas.
5. Tipo manzana
Sabes que este es tu cuerpo cuando la cintura no sólo ha crecido sino que además lo ha hecho más que los hombros y cadera. Estéticamente no es difícil disimularla con las hechuras correctas: evita ajustarte en la cintura, cinturones anchos y si usas finos ajústalos más altos que el ombligo (aunque te aconsejo evitarlos). Lo ideal es que des protagonismo al escote con cuellos y collares llamativos o a las piernas usando faldas divertidas y un poco cortas si tienes piernas de infarto. La gracia es usar ropa a medida, ni muy ancha ni ajustada. Pero te recomendaría, por tu propia salud, que comiences a incorporar a tu rutina un paseo diario de diez a veinte minutos: oxigenar la sangre y bombear el corazón son imprescindibles para una salud duradera. Si acumulas grasa en la parte central de tu tronco, este sencillo cambio en tu vida te puede abrir las puertas a una nueva salud, estado de ánimo (es como tomarte un antidepresivo natural) y por qué no, una complexión cada vez más ligera.
Ahora que ya sabes cuál es tu complexión y comprendes qué le sienta mejor a la tuya y a las demás, cuando vayas a comprarte una prenda te resultará fácil saber cuáles sí y cuáles no debes adquirir. Cuando abras tu armario dispuesta a crear un estilismo para ir a trabajar, para salir a divertirte o para un evento especial te resultará fácil saber qué sí y qué mejor no. Pero ¿sabes cuál es el mejor truco de belleza? Una persona segura, una cara amable, un carácter “disfrutón”, una mente relajada... Definitivamente la felicidad es el mejor secreto para triunfar allá donde vayas. Aporta un carisma y una luz que ninguna prenda puede darte. Hablaremos de ello...