CALVIN KLEIN: ORDENO Y MANDO

La colección de esta temporada de Calvin Klein ha sabido conjugar a la perfección un estilo sobrio, casi militar, con una refinada feminidad: líneas y tonos severos junto a detalles audaces. Francisco Costa, director creativo de la firma, ha mostrado que el cuero se puede malear con maestría hasta formando cuadros. Y es que no hay duda de que esta materia prima es el must de este invierno.

La napa y el cuero, flexible, sofisticado y elegante, es el gran protagonista de la colección. Abrigos, chaquetas, faldas y vestidos muestran toda la riqueza de uno de los materiales más versátiles que la firma aúna con audacia al encaje, a la seda o a la lana. 

Las líneas no pueden ser más femeninas, engrandecida aún más por el marchamo militar de hombreras, con cinturas marcadas, solapas importantes, cuellos en pico o a la caja y sobriedad de los tonos. El negro, el azul noche, el verde oscuro y el berenjena son los colores elegidos para la colección, que también se aventura con algunos looks en blanco hielo. 

Las prendas de piel se atreven con todo: vestidos a la rodilla o midi, con cuerpo ajustado, hombros rectos, cinturones con hebillas metálicas cuadradas, faldas evasé, tableadas o con tiras anchas formando cuadrículas de cuero. Conjuntos de faldas tableadas y chaquetas con pespuntes de estilo guateado. Lujosos vestidos-abrigos en alpaca de lana con detalles acharolados en negro y azul tinta china. 

Para la noche, también el negro y el azul tinta tiene su oportunidad en vestidos con tiras de napa con efecto de flecos y cortes horizontales a lo charlestón, conjuntos de tops de piel y pantalones de cachemire o satén muy holgados. 

Los complementos se decantan por botas de caña alta estilo militar y zapatos de charol de horma salón con un cierto look años 40. Y una de las características que marca mucho esta colección son los cinturones anchos con hebillas planas, tanto para vestidos como para abrigos y chaquetas.