BLANCO Y NEGRO, EL DÚO DEL ÉXITO

La moda del verano pasado nos ha mostrado unos contrastes insólitos en la combinación de colores, sin embargo no ha podido desplazar en éxito al contraste más elegante y eterno: el blanco y el negro. Estos dos tonos, que parecían fuertemente aposentados en las distintas estaciones del año, han tenido también su “revolución” estilística y se muestran dispuestos a triunfar en cualquier época.

El negro ya no es patrimonio solo del otoño-invierno y el blanco -el único color imprescindible en el verano- aparecen en los armarios más refinados… Además de mostrarse como un total look tienden a combinarse entre sí en un mismo conjunto y muestran también sus preferencias sobre los tejidos. ¿Hay algo más favorecedor que un vestido de terciopelo negro, un sastre de tweed o un vestido blanco de un tejido bordado?

El tweed hace muy buenas migas con ellos en esta nueva temporada y el terciopelo es un punto imprescindible para las épocas mas frías. Un look de lo más elegante es también el conjunto de una falda negra y una blusa blanca o viceversa, o buscar el contraste de un abrigo negro sobre un traje blanco y otras combinaciones parecidas de éxito seguro.