CLARA BILBAO EXPONE EN EL MUSEO DEL TRAJE
EVENTOS, Octubre 2018
Clara Bilbao en el Museo del Traje

Clara Bilbao con su Goya
Con un ritmo trepidante, la película de cine negro “La sombra de la ley”, dirigida por Dani de la Torre, cuenta con un espléndido vestuario diseñado por Clara Bilbao, una mujer que ya ha ganado dos Goya en el cine español con su diseño indumentario para películas como “Blackthorn” (2011) y “Nadie quiere la noche” (2015). Los trajes de la recientemente estrenada película “La sombra de la ley” se exponen en el Museo del Traje en Madrid hasta mediados de enero.
La exposición, un viaje fascinante por la moda humilde y lujosa de los años 20 del siglo pasado, se divide en tres partes: moda de los obreros, policías y sindicalistas, noche y music hall. Toda una puesta en escena para representar los movimientos anarquistas en Barcelona, por un lado, con el paralelo mundo de los sindicalistas y policías, más el lujo de la burguesía y la indumentaria del music hall, con la música de charlestón como fondo.
El paralelismo con los años de la ley seca en Chicago no se hace esperar. En Barcelona o París no había ley seca, pero sí bajos fondos y corrupción, al tiempo que connivencia del poder y las cloacas, lo que se pone de manifiesto en "La sombra de la ley", con Luis Tosar, Michelle Jenner, Adriana Torrebejarano, Ernesto Alterio, Vicente Romero, Manolo Soto, Paco Tous, Jaime Lorente, Pep Tosar y Fredi Leis como protagonistas. El nombre del político Martínez Anido sobrevuela en las palabras de este film situado en la Barcelona de 1921, con el desastre del Annual en Marruecos de fondo. Años convulsos y revolucionarios, al tiempo que “felices 20”, que ofrecen una indumentaria de contrastes.

Indumentaria masculina

Michelle Jenner caracterizada

Parte de la exposición
CLARA BILBAO EXPONE EN EL MUSEO DEL TRAJE
Nada ambienta tanto como la moda, ese arte efímero y narrativo al mismo tiempo. Desde el uniforme de rayas de las telefonistas que comienzan a reivindicar la igualdad de trato y salarios con los hombres, hasta la recreación de los trajes de noche para asistir o los de bailar en los escenarios del club o el cabaret. “En el vestuario diseñado no hay copia alguna, sino recreación”, dice Clara Bilbao (Bilbao, 1967), diseñadora que estudió Diseño Escénico en Madrid y reside en la capital de España.
El vistoso uniforme de telefonista está realizado en loneta de algodón con rayas anchas blancas y azulonas. El color claro simboliza la luz que se enciende para comenzar la lucha por los derechos de la mujer. La vestimenta obrera de calle es en paño grueso y camisas zurcidas y parcheadas a mano. El abrigo es de corte masculino.

El director y los protagonistas
Para la noche, tejidos de pedrería, bordados y guipur. Brillo y lujo para la noche de fiesta. Las artistas del cabaret lleva trajes mínimos de charlestón con centenares de piedras facetadas para componer de forma artesanal, piedra a piedra, los flecos y las tiras que aportan movimiento al baile. Las transparencias y veladuras en este vestuario recrean bien ese mundo bajo la noche oscura y misteriosa.
Los hombres también muestran un vestuario de lujo en paños y terciopelos negros y rojos. El poder, la seducción y la apariencia necesitan la moda para ponerse en la escena del gran teatro del mundo, en este caso de la película que nos retrotrae a los complejos años 20.