AFRICA, HILO A HILO
CULTURA, Marzo 2018La telas de Africa. Foto Kim Manresa
Lona kente. Sara Velázquez
Se puede transmitir un mensaje de muchas maneras. La exposición “El lenguaje de las telas. Arte textil en África Occidental” es un ejemplo de ello. Este compendio de telas de Ghana, Malí y Costa de Marfil, acompañadas de fotografías de Kim Manresa y diseños de Maica de la Carrera, ahonda en la riqueza simbólica de los tejidos del continente vecino y enseña cómo, más allá de su mero valor estético, revelan muchas cosas.
Los colores y las formas que pueblan los paños son una expresión de las culturas de las que proceden, pues la vestimenta es expresión de la identidad de quien la lleva. La materia prima, el color y los motivos de una tela pueden ofrecer pistas sobre la etnia, el estatus social o el rango de una persona. Así, los lienzos son un espejo de las culturas de las que proceden, espejo al que podemos asomarnos hasta el día 20 de mayo.
“En la exposición se muestran 38 telas de medio y gran formato, así como 13 de pequeño formato”, cuenta Patricia Alonso, conservadora del Museo Nacional de Antropología, entidad que acoge la muestra y la ha gestado junto con "La Galería de Mamah África". Dentro de esta colección se puede diferenciar entre una gran variedad de tejidos.
El kente se elabora con materias primas de calidad a través de un procedimiento complicado, y está tradicionalmente ligado a ritos ceremoniales reales; suponen una representación icónica de la historia de Ghana.
Estampando un tejido adinera. Kim Manresa
Telar. Foto de Kim Manresa
Preparando telas. Fim Manresa
AFRICA, HILO A HILO
La costumbre marcaba que los tejidos adinkra se usasen como telas de luto, con fondos de color oscuro; hoy día también se usan en fiestas importantes pero se prefiere una base clara. Los símbolos de la tela, que reciben el mismo nombre que ésta, se estampan con tampones tallados en calabaza o con sellos de madera o de metal empapados en tinte vegetal.
El bogolan, que significa hecho de arcilla, es un tejido de tierra y algodón originario de Malí hecho con una técnica de ascendencia milenaria. El batik, procedente de Asia, llegó a África en el siglo XIX. En los lienzos korhogo, que empezaron a producirse en la década de los 60 en Costa de Marfil, el protagonismo son las pinturas de animales, vegetales y personajes enmascarados que los decoran.
Este compendio sirve de ventana a los colores de África. En cuanto al colorido de las telas, "las batik, kente y adinkra presentan una paleta muy variada con tonos muy vivos. Las telas bogolan y korhogo tienen una gama mucho más reducida, con colores negro, blanco y tonos ocres”, enumera la conservadora. La antigüedad de los paños expuestos varía de unos a otros: “Las telas más antiguas son de la década de los 60; las telas korhogo son de los 90; la mayoría son más recientes, las adquirió el año pasado la Galería de Mamah África”. Esta entidad es la propietaria de las telas, excepto de las korhogo, que forman parte de las colecciones del Museo Nacional de Antropología.
Tapiz de Costa de Marfil. MNA
La meta de la muestra no es sólo que se admire la perfección estética de los tejidos, sino también su altura técnica y cómo están vivos en el uso cotidiano. Para ello sirve de instrumento una colección de 86 fotografías de Kim Manresa. La mirada del fotógrafo muestra, por un lado, el espíritu del proceso de fabricación de las telas. Y, por otro lado, acerca al espectador momentos de la vida corriente en los que se aprecia cómo éstas se utilizan para vestir. La gran mayoría de estas fotos, para mayor realismo, se ha estampado sobre tejidos hechos con fibras iguales a las de las telas que aparecen en ellas.
Para dar una visión más amplia, añade Alonso, “también se exponen objetos relacionados con la producción de las telas o con el contexto cultural del que proceden”. Así, acompañan a fotos y paños objetos que enriquecen la exposición ayudando a que el visitante se forme una imagen global.
Las creaciones de la diseñadora Maica de la Carrera que se exhiben unen el vestir actual y las raíces de la cultura africana. Los vestidos se han completado con joyas contemporáneas firmadas por Andrea Baragaño. Como broche final, los montajes artísticos de Carmen Varela y Ricardo Álvarez Muiña. Las lonas del espacio central las ha diseñado Nicolás de la Carrera partiendo de fotografías de Sara Velázquez.