OTRURA: PREMIO A LA MEJOR COLECCIÓN DE MBFWM
ENTREVISTA, Mayo 2021Verónica y Sergio son Otrura
Colección "Latente"
“Veni, vidi, vici”. La famosa frase de Julio César se podría aplicar a Otrura, que se estrenó en Mercedes-Benz Fashion Week Madrid y consiguió el Premio L’Orèal a la Mejor Colección de esta reciente edición. Otrura es Sergio de Lázaro y su socia Verónica Abián. Ambos dirigen una marca con casi 19 años de tradición y vanguardia en el mundo de la costura y los accesorios, trabajados con mimo y apoyando a las pymes. Por eso, durante la presentación de la colección “Latente” se ofrecieron imágenes de un pequeño pueblo castellano-manchego, de sus campos y del taller donde se elaboran sus prendas, con vainicas a mano, tijeras cortando telas sin prisas, planchados tranquilos y sonidos textiles.
Con estudios de Derecho y Máster en Business and Marketing Management, Sergio de Lázaro es el alma de Otrura y dirige actualmente sus colecciones. Durante toda su trayectoria en otras casas de moda, estudia los diferentes oficios y se especializa en Marroquinería, Sastrería y Costura, así como en alta relojería en diferentes talleres tanto en España, en Francia y Suiza. En otoño de 2018 crea una colección de calzado masculino y en octubre 2019 lanza la primera colección de costura y sastrería. Verónica Abián le apoya en la toma de decisiones pero sobre todo en la dirección de Comunicación.
Con esta colección que han titulado “Latente”, vuelven la mirada a la España vacía, a sus tradiciones, a las raíces de los talleres y a los oficios latentes en las prendas.
-¿Qué supone tu entrada en la pasarela más importante de España en estas circunstancias?
OTRURA: PREMIO A LA MEJOR COLECCIÓN DE MBFWM
-Creemos que es fundamental estar y apoyar el sector en nuestro país y hacerlo desde dentro. Hay que desfilar, hay que intentar que nuestras pasarelas tengan músculo, que la industria de la moda tenga gente que apueste por ella, y trabajar con las instituciones que mantienen visible este escaparate. Por eso estamos tanto en las pasarelas MBFWM como en 080 Barcelona.
-¿Cuál es el lugar de Otrura en este sector?
-Entramos en el textil por nuestra pasión hacia la moda y porque creemos que hay algo que aún no existía en el mercado y que ese hueco lo podía ocupar Otrura: transmitir un concepto muy personal de tradiciones junto con vanguardia. Hay un entorno de soledad y olvido, donde los peligros latentes son la única realidad que acompañan a los equipos y a las personas que mantienen la industria.
Calzado Otrura
-¿Cómo habéis concebido una colección como ésta?
-Elegimos un tema anual y lo trabajamos de septiembre a agosto, sin estaciones. Quisimos hablar de lo latente en contraposición a lo patente, y dimos con una realidad, que son los oficios latentes que hay detrás de la moda. Hemos intentado plasmar una realidad muy diferente en la industria de la moda, comparada con el respeto y reconocimiento patente. Por eso lo hemos expresado con costuras vistas, acabados en vivo, con una propuesta audiovisual donde nos asomamos al taller de costura y ponemos rostro a esa mano que trabaja.
-Una curiosidad: ¿qué significado tiene el nombre de Otrura?
-Viene de nuestro afán de recuperar o intentar que no se pierdan esos oficios excepcionales y artesanos, transmitidos de generación en generación. Otrora significa “en otro tiempo” pero nosotros al traerlo al momento contemporáneo lo convertimos en “otra costura” y de ahí sale Otrura.
“CONFECCIONAMOS EN PEQUEÑOS TALLERES FAMILIARES”
-El textil en la marca es reciente...
-Sí, empezamos con calzado de caballero y luego nos costó mucho hallar los talleres que se ajustasen a lo que queríamos hacer. Encontramos en Moral de Calatrava (Ciudad Real) un taller familiar que se había dedicado siempre al textil y donde poder trabajar prenda a prenda con mimo. Los zapatos están fabricados en Sax (Alicante) y las piezas de marroquinería en Ubrique (Cádiz). Pero todo lo hacen en pequeños talleres familiares.
-¿Cómo han vivido estos largos meses de pandemia? ¿Se paró la producción?
-Durante el confinamiento estuvimos trabajando y pensando. Y sí, tuvimos que parar la producción y acoplarnos a las necesidades de los talleres, que en esos momentos era sobrevivir haciendo epis. Así que tuvimos que dejar lo nuestro para enfrentar las necesidades que había. Y en cuanto pudieron retomaron la confección de nuestras prendas, renunciando a la cantidad, pero es una forma de salir adelante. Además, como nosotros no tenemos stock (es todo bajo demanda), pensamos en sacar menos piezas e ir aumentando poco a poco. Y no pasa nada, lo que buscamos no es sólo la calidad, sino la excelencia.
-¿Quiénes son vuestros clientes?
-Es una clientela transversal. Tenemos clientes que conocen bien la moda y tienen unos valores con respeto a ella y la van transmitiendo a una nueva generación que quizás aún no se pueden permitir esta moda, pero sí están adquiriendo ese buen gusto. Es gente que valora que hagas algo que perdure, que hagas algo que dure y se pueda recoser, reparar...
-¿Cuál es tu sistema de trabajo?
-Comienzo por una silueta, por una línea, y a partir de ahí busco los diseños y las soluciones para conseguirlo y luego ya adquiero tejidos. Por razones de sostenibilidad primero hacemos la toile de cada prenda y luego adquirimos los tejidos necesarios, así no malgastamos. Nos gusta sorprender en detalles de pliegues, de asimetrías, vainicas, etc.
-¿Dónde os proveéis de tejidos?
-Usamos lana fría, cashemere, algodón, mezclas de lana y seda… La alpaca la adquirimos en Perú, donde nos provee un matrimonio que cría alpacas: la piel en Ubrique y lana francesa.
-¿Qué pieza os ha salido redonda o es vuestra preferida?
-(Risas) Eso es como los hijos, a todas las queremos. Esta es una colección permanente a la que se van sumando piezas, por eso trabajamos mucho con colores neutros: el blanco, el marfil, negro, el beige, el azul noche, gris… Ahora hemos incorporado un suave amarillo mimosa, ya que estamos en un momento de alegría y de luz porque estamos saliendo adelante.
-¿Qué objetivo tiene Otrura?
-Yo quiero que a la gente le guste nuestro trabajo, poner nuestro granito de arena en que se valore el trabajo de los talleres artesanos y en que venzamos a la pandemia.