HIPERSEXUALIZACIÓN INFANTIL, TODO UN RETO
OPINIÓN, Noviembre 2020Guapis
Con vestimenta de adulta
El tema no es nuevo. La hipersexualización infantil ha dado motivos de debates y polémicas en distintos países. Quizás se había tocado menos en España pero he comprobado que en estos momentos estaba calando con fuerza cuando me ha llegado un correo electrónico de una entidad, que suele participar en los debates más candentes, pidiendo mi firma para la retirada de la película “Cuties” -en español llamada también “Guapis”- una de las últimas de Netflix, que ha comprado los derechos exclusivos, presentada como para mayores de 18 años y cuyas protagonistas son niñas de 11 años, una incongruencia bastante curiosa. No pretendo hacer una crítica cinematográfica del film en cuestión, solo tomar como referencia las reacciones que está suscitando sobre un tema tan difícil y preocupante.
Las “motivaciones” que esgrimían en el correo recibido pidiendo firmas es que la cinta en cuestión es una clara apuesta por la pornografía y la hipersexualización infantil y se había saltado todas las líneas rojas con el empleo de un morbo subido e innecesario. La película cuenta la historia del paso de la niñez a la adolescencia de Amy, una inmigrante senegalesa de 11 años en un barrio obrero francés en el seno de una comunidad musulmana y dentro de un entorno familiar superconflictivo. Amy se une a un grupo de amigas de su edad para formar un grupo de twerking, le dan al pole dance y presumen de hacer en la barra acrobacias típicas de los clubs de streptease con toda clase de coreografías sensuales. Su vestimenta es totalmente impropia para su edad lo mismo que sus maquillajes y sus actitudes provocadoras.
Las reacciones han sido múltiples. En este pasado mes de septiembre más de 30 legisladores de Estados Unidos han pedido al Secretariado de Justicia de Nueva York que intervenga, porque la película puede violar presuntamente la ley federal sobre pornografía infantil. También representantes del gobierno brasileño han instado a recoger firmas pidiendo la retirada de la película. Consta además que la plataforma distribuidora ha recibido la baja de muchos clientes e incluso se han disculpado diciendo que todo había sido un error en el enfoque del marketing pero ellos no pretendían ni mucho menos potenciar la hipersexualización infantil sino solo denunciarla.
Publicidad y frivolidad
Protejamos a la infancia
Niña modelo
HIPERSEXUALIZACIÓN INFANTIL, TODO UN RETO
Estas declaraciones recuerdan anteriores debates y también informes sobre este tema. Uno de los más sólidos que nunca ha perdido su eficacia es el llamado “Informe Baley”, cuando el gobierno de Inglaterra encargó al senador Gregorio Baley, especialista en temas educativos, un informe sobre esta cuestión, que el senador define así: “La sexualización de posturas y códigos de vestimenta considerados demasiado precoces” y en su informe alerta de la gran cantidad de imágenes sexuales que rodean constantemente a los niños. Señala como fuentes inductoras: la publicidad presentando a niñas como adultas, la industria de la moda que promociona y vende ropa inapropiada y alerta del peligro de una infancia cada vez más erotizada. Entre sus principales consecuencias señala que se destruye así la identidad personal, la autoestima y se fomenta que valoren primordialmente su atractivo físico dando lugar a una generación de mujeres frágiles y vulnerables con la exaltación de sus atributos sexuales por encima de otras cualidades importantes.
Recuerdo también un informe posterior de la senadora francesa Chantal Jouanno que alertaba sobre la intrusión de lo sexual de manera precoz aduciendo que pone en grave peligro el bienestar psicológico y afectivo de los niños. Advertía que en algunas escuelas primarias de Francia habían tenido que prohibir el uso de maquillajes, tacones altos y otros abusos parecidos mientras que en algunas tiendas proponían sujetadores con relleno para niñas menores de 10 años, tangas para niñas a partir de los 6 o sandalias con tacones altísimos a partir del número 30. La senadora señalaba que esta tendencia va muy unida a la “banalización de la pornografía” y añadía en su informe que la hipersexualización “es un atentado contra los principios de la dignidad de la persona humana y la igualdad entre los sexos”.
hipersexualización de la infancia en el film
Como siempre lo mejor ante estos peligros es la educación. A los padres les toca enterarse muy bien de los programas de televisión o las páginas de Internet que manejan sus hijos porque en esto como en todo “más vale prevenir que curar”. Y no atender a las falsas razones de medios de comunicación o espectáculos que presentan situaciones amorales con la excusa de ser solo una denuncia.
Tomando como punto de referencia la película citada podríamos preguntarnos: ¿“Habla de lo mal que está la sexualización de menores?”. Según los expertos la intención no se ve por ningún lado. “¿Tiene una moraleja para decirnos que éste no es el camino?”. Y la respuesta también es no. Porque no sería una justificación la historia de una niña oprimida por un ambiente familiar que busca una vía de escape. La película falla estrepitosamente en transmitir un mensaje positivo y justo. Lo que transmite es bastante peligroso como es normalizar un comportamiento totalmente impropio de esta franja de edad sin unos argumentos que podrían clarificar lo que supone la hipersexualización a nivel personal y social.