TIEMPO DE REGALAR
OPINIÓN, Diciembre 2022El regalo en Navidad
Tradición cristiana
“Si las estrellas bajan para mirarte, detrás de las estrellas camina un ángel”. En esta poesía de Luis Rosales se citan dos elementos de gran calado dentro del escenario navideño que la llegada del mes de diciembre nos invita a preparar. Por un lado, los ángeles, que fueron los veloces mensajeros del Nacimiento de Jesús, y por otro las estrellas, que nos recuerdan a aquella que guió a los Reyes Magos en su peregrinación hacia el portal de Belen y son los protagonistas de una fiesta que en España y en muchos países de Hispanoamérica goza de una popularidad y un cariño especial.
Ya estamos envueltos por completo en el ambiente navideño: las luces, la decoración, las compras … ¡anticipados por el black friday! Las tradiciones navideñas, vividas con un estilo muy parecido al actual, datan del siglo XIX. Podemos comprobarlo en los cuentos de Charles Dickens y veremos que fue en esta época cuando empezó a generalizarse el hecho de introducir en las fiestas navideñas una costumbre muy arraigada: los regalos.
Se han utilizado la figura de distintos “portadores” para este cometido –Papa Noel, Santa Claus, la Befana, etc.- pero en el ranking de todos ellos ganan aún en nuestro país los presentes que tan generosamente traen los Reyes Magos, unos personajes históricos que son un símbolo real de unir a distintos pueblos y razas en la adoración a Cristo.
El Evangelio de San Mateo nos demuestra la realidad de unos personajes a los cuales la fantasía ha añadido algunos nuevos elementos pero que no desvirtúan la realidad de que el cristianismo los ha incluido dentro de su patrimonio. Dice textualmente san Mateo: “Unos magos llegaron desde Oriente a Jerusalén preguntando: ¿dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en Oriente y hemos venido a adorarle”.
Calle comercial en Navidad
El arte de acertar
Los magos de Oriente
TIEMPO DE REGALAR
A continuación, narra el evangelista las entrevistas y posterior huida de los Magos del Rey Herodes y su alegría al encontrar al Niño en brazos de su madre, para decir textualmente: “Postrándose le adoraron, luego le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra”. Es en memoria de estos dones ofrecidos a Jesús de donde arranca la costumbre de obsequiar a los niños en esta fecha -el 6 de enero- con juguetes y golosinas.
Y como un elemento más que gira alrededor de la existencia de los Reyes Magos están sus reliquias, que fueron descubiertas por santa Elena y se veneran actualmente en la catedral de Colonia, a cuyo Obispo se las regaló el emperador Federico Barbarroja en 1164. Durante este mes de diciembre a los mayores nos toca “imitar” la generosidad de los Magos y lanzarnos a la búsqueda de los regalos no solo para los niños, sino también para otros familiares, ya que en muchos hogares se hace extensiva a todos la costumbre de los regalos. Se asegura que los preferidos de los españoles son los productos relacionados con la tecnología, la moda y complementos.
La ilusión de los niños
Se acusa a veces a estas fiestas de comercialización y materialismo. Es cierto que algunos explotan su vena comercial de un modo exagerado o incurren en gastos poco soportables para su economía, pero no es menos cierto que el tono familiar de esta fiesta, la alegría del regalo que se cotiza sobre todo por su valor sentimental más que por el material, y sobre todo la ilusión de los niños, prevalece entre la gente de los más diversos estamentos sociales.
En este número de la revista hacemos patente la imagen de las fiestas como mensaje de paz y optimismo en medio de una sociedad convulsa y desencantada. Como dejó escrito Dickens: “Honraré a la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año”. ¡Feliz Navidad!