Y AHORA ¿QUÉ HAGO CON MI PELO?
IMAGEN, Septiembre 2019El verano estropea nuestro pelo
Sanea las puntas abiertas
Vuelta a casa. El mar, el cloro de las piscinas, la exposición al sol durante muchas horas, sumado al castigo habitual al que sometemos los cabellos, como las dichosas planchas, tintes, decoloraciones… y ya ni hablamos de esas mechas de color fantasía. Lo bueno habría sido tener el pelo natural, haber utilizado un protector del pelo en spray antes de salir de casa, cubrirnos la cabeza con un sombrero en la playa y luego volver a aplicarnos el spray al salir del agua. Lavarnos bien el pelo cada día e hidratarnos con una buena crema, usar una ampolla específica para pelos dañados una vez a la semana o cada 4 días.
Pero seamos realistas: con proteger la piel de nuestros hijos y dormir todo lo que no hemos dormido en el año nos hemos dado por satisfechas. Y es verdad, las vacaciones son para disfrutar, no para preocuparnos todo el tiempo por la piel, el pelo, la pedicura… Sinceramente creo que se nos exige demasiado y también tenemos derecho a bajar la guardia.
Lo primero de todo es ver el nivel de estropicio que tenemos. Si el cabello tiene las puntas abiertas y quebradas como alambres encrespados, la mejor solución es meter las tijeras. No sufras: pueden hacerte un corte a capas que casi no se note en el largo de tu melena, dé volumen y movimiento y además sanee. ¿Qué les pasa a las adolescentes con ese largo eterno? En mi juventud se llevaba largo pero no en plan Rapunzel… Está bien, podemos respetar las longitudes saneando a capas.
Si el pelo presenta una sequedad aguda, lo ideal es que apliquemos una hidratación de aceite de argán, o de keratina. Si usas aceites, no uses calor o puedes provocar el efecto contrario: freír el pelo en lugar de hidratarlo. Yo prefiero aplicar tratamientos de keratina y dejarlo que actúe unas doce horas. Te vas a casa con el pelo mojado y así te hace efecto muchas más horas.
Recupera el brillo
Usa aceite de argán o keratina
Aplica champús nutritivos
Y AHORA ¿QUÉ HAGO CON MI PELO?
REMEDIOS CASEROS
Hay algunos tratamientos caseros que funcionan muy bien: el aguacate tiene un poder hidratante mucho mayor que cualquier mascarilla. Puedes mezclar aceite de coco o de argán con aguacate y aplicártelo de medios a puntas: ojo, nunca en la raíz del pelo o tendrás el cuero cabelludo grasiento durante semanas. Te lo envuelves con un gorro de ducha o con papel film y lo dejas actuar una hora. Luego debes lavarlo bien dos o tres veces. Notarás que el pelo brilla muchísimo. El secador, la plancha y todos los aparatos que aplican calor van a dañar aún más lo dañado: si te quema la mano, te quema el pelo así que intenta evitarlos a toda costa por el momento, y si usas secador, hazlo con aire templado, no caliente.
Batidos verdes de aguacate
Recuerda que la salud siempre es mejor de dentro hacia fuera. Por muchos productos que te pongas en el pelo si no estás bien alimentada, las células del cabello se van a quebrar. De hecho el organismo tiene sus prioridades y el pelo no es una de ellas. Los mejores alimentos para el cabello son en primer lugar el huevo, los cítricos, las legumbres… y sobre todo, lo verde. Sí, sí, como lo lees: cuanto más verde, mejor para tu pelo. Acelgas, lechugas, espinacas, berro, brócoli, judías verdes, guisantes…
Yo recomiendo mucho un batido por las mañanas que además de estar buenísimo te llena de energía –sin necesidad de café-, de hierro, te ayuda al tránsito natural y para el pelo ¡es fabuloso! ¿Te atreves con un nuevo hábito en tu rutina diaria que te va a cambiar la vida? Pues toma nota: espinacas, piña, limón y miel, cantidades al gusto, siempre más espinacas que el resto. Luego cada uno puede darle el toque que quiera: puedes ponerle aceite de oliva crudo, eso sí que te va a dar un brillo en el pelo brutal, o aguacate, o jengibre que además de dar un sabor muy intenso es bueno para los dolores e inflamaciones.